Almería se prepara para afrontar importantes cambios viales a partir del próximo 4 de diciembre debido a las obras de soterramiento ferroviario. La próxima demolición del puente de la Autovía del Aeropuerto y el paso subterráneo del Camino de La Goleta obligará a habilitar cuatro nuevos viales para evitar colapsos de tráfico en la ciudad, según informó el subdelegado del Gobierno en Almería, José María Martín.

Nuevas vías para asegurar la fluidez del tráfico

Los nuevos canales de circulación estarán distribuidos en zonas clave de la ciudad: Los Molinos, el Estadio de los Juegos Mediterráneos, la Carretera de Sierra Alhamilla y la Vega de Acá, según explicó Alejandro Martínez, director de las obras. Estos viales permitirán el tránsito de los miles de vehículos que, a diario, cruzan el puente y el paso subterráneo.

Carretera de Níjar y barrio de Los Molinos

Se ha acondicionado una calzada de doble sentido que incluirá espacio para peatones, facilitando la conexión entre el barrio de Los Molinos y la Autovía del Aeropuerto (AL-12). Además, se ha diseñado una conexión directa entre la calle Pilones y la glorieta de la AL-12, lo que permitirá mantener las rutas de tres líneas de autobuses urbanos (L19, L30 y L31).

Vega de Acá y Carretera de Sierra Alhamilla

Un nuevo vial transversal de doble sentido conectará la Carrera de los Minerales con la Carretera de Sierra Alhamilla, con espacios habilitados para peatones. Una glorieta regulará el tráfico en esta intersección, mejorando la permeabilidad en la zona.

Zona del Estadio Mediterráneo

Se habilitará una conexión en sentido único entre el Estadio Mediterráneo y la Carretera de Sierra Alhamilla. Esta alternativa, junto al nuevo vial de la Vega de Acá, garantizará el flujo de vehículos tras la demolición del paso elevado. Además, se instalará una glorieta provisional en terrenos utilizados para prácticas de autoescuela.

Impacto en el transporte público y accesibilidad

Las nuevas conexiones permitirán el paso fluido de autobuses urbanos y asegurarán el acceso a negocios e industrias de la zona industrial a través de calles como Rubí, Mármoles y Molino Pepón. El objetivo es minimizar el impacto del cierre de estas vías principales en el tráfico de la ciudad.

Las autoridades locales han instado a la ciudadanía a mantenerse informada sobre los desvíos y a planificar sus desplazamientos con antelación para evitar contratiempos durante el tiempo que duren las obras.

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